CUALQUIER SIMILITUD CON LA REALIDAD, ES MERA COINCIDENCIA.

CUALQUIER SIMILITUD CON LA REALIDAD, ES MERA COINCIDENCIA.

En julio de 1968, previo a la celebración de La XIX Olimpiada en México y producto de la actitud del gobierno represivo que presidió Gustavo Díaz Ordaz
Un incidente entre los estudiantes de una preparatoria y una prevocacional, fue aprovechado tanto por el gobierno de la república paranoico y represor, como por integrantes de la izquierda aún no reconocida como fuerza política, para provocar un estallido social con grandes costos en pérdidas fatales en ambos bandos, pero más en civiles.

Esto fue llamado El Movimiento Estudiantil de 1968, que como otros, surgieron en diferentes partes del mundo y en México fue el parte aguas, que de alguna manera provocó cambios sustanciales en la forma de gobernar.
Pero para esto se tuvo que pasar por una represión brutal de parte del gobierno de Gustavo Díaz Ordaz y del entonces secretario de gobernación Luís Echeverría Álvarez, de quien se dice fue el autor intelectual de la masacre en octubre de 1968 en Tlatelolco, días antes de que se iniciaran los juegos olímpicos ese año en nuestro país.
En cierta medida, el circo que representó esta contienda olímpica atenúo un poco los palos, no pan, que recibieron las víctimas de estos sangrientos hechos, que a pesar de haber transcurrido ya casi cuarenta años, los verdaderos causantes de ellos aún gozan de cabal salud, por la complicidad de quienes les han sucedido en el gobierno de México, que se siguen tapando con la misma cobija, sin importar el color partidista de donde han emanado.

Esto lo traigo a colación, porque antes de que se inicien los Juegos Olímpicos en China, han surgido una serie de manifestaciones en contra de ellos, por parte de un numeroso grupo de activistas de diferentes partes del mundo, incluso chinos, en un intento de boicotearlos por la invasión del Tíbet, el sojuzgamiento de sus habitantes al imponerles una cultura diferente a la de ellos y mantener en el exilio a su guía espiritual El Dalai Lama (quien aunada a la santidad de que fue investido siendo un niño, cuenta con una serie de conocimientos universitarios, científicos y filosóficos, que lo han convertido en un Dalai excepcional), todo esto por la ambición expansionista de China.
Por esta razón en los Juegos Olímpicos de Beijín en todas sus sedes deportivas y en previsión de los atentados que pudieran suceder (que afectarían la integridad física de los deportistas y personajes que asistieran a ellos), se han invertido millones de yuan en su seguridad, para movilizar miles de policías y residentes vestidos de civil, como parte de la operación China segura.
No obstante ello, el lunes pasado en la ciudad de Kashgar Oeste, China, sucedió un atentado en el que resultaron víctimas mortales diez y seis policías y otros diez y seis fueron heridos por los artefactos explosivos que dos sujetos vestidos como policías, en un acto terrorista arrojaron contra ellos.
Por esta razón las autoridades chinas reforzaron las medidas de seguridad y declararon estado de alerta en todas las dependencias de gobierno, escuelas y hospitales.
Esto aumentó la tensión ya existente en la ciudad de Kashgar y el acoso policial contra miembros de la prensa extranjera, que han sido víctimas de presiones y maltratos por tomar fotografías de estos hechos.

Espero que estos eventos terroristas no se multipliquen, para que los Juegos Olímpicos de Beijín sean todo un éxito y para que las empresas transnacionales que participan en su organización no sufran pérdidas en sus multi millonarias inversiones y ganancias que tienen proyectado obtener, ya que las pérdidas humanas como acostumbran, poco les importan.

Ciudad Juárez, Chihuahua. Agosto 6 del 2008. José Luís Elías García.