martes, 26 de agosto de 2008

CERO TOLERANCIA. LIBERTAD DE EXPRESION Y LIBERTINAJE.

CERO TOLERANCIA. LIBERTAD DE EXPRESION Y LIBERTINAJE.

La corta y muy pichi cateada luna de miel que se vivió en el sexenio foxista, en cuanto a su muy presumida y tolerada libertad de expresión (que utilizó como cortina de humo, mientras llevaba a cabo sus enjuagues económicos muy redituables), está llegando a su fin. Cabe aclarar que una parte de esta pareja luna mielera (los medios de comunicación, muy especialmente los televisivos), han hecho y siguen haciendo cera y pabilo, abusando en grado supremo de esa libertad e incurrido abiertamente en el libertinaje.

Después de la manifestación de los familiares de las trece víctimas de la masacre en Creel, en Chihuahua capital, frente al hotel donde se celebró la reunión cumbre de presidentes de tribunales y procuradores de justicia de los estados, el gobernador José Reyes Baeza acudió a ese poblado para reunirse con ellos.
Posteriormente y en referencia a esos lamentables hechos, anticipó que establecerá un nuevo cuerpo policíaco integrado por Cipoles, para que brinde seguridad a Creel y toda la Sierra de Chihuahua.
Seguramente los habitantes de ese poblado, esperaran que los Cipoles no corran asustados como los anteriores o que no estén involucrados con el crimen organizado.

Pero desde entonces, quizá como muestra de su desespero, de su impotencia para controlar la enorme ola de violencia que inunda buena parte del estado grande, el gobernador ha venido insistiendo en que es necesario revisar el régimen de garantías constitucionales.

Este día ante universitarios, catedráticos y estudiantes de derecho de La Universidad Autónoma de Chihuahua, José Reyes Baeza dijo que el país ha caído en una “laxitud imperdonable, en un libertinaje”, por lo que los invitó a sumarse a “El Cero Tolerancia” contra la impunidad y por la legalidad en todo el país, mediante la revisión al régimen de garantías constitucionales y poner un alto al libertinaje social. Además agregó que hay que atacar la impunidad para bajar la incidencia de delitos y que no se trata nada más de hechos graves sino de cualquier infracción a un reglamento.
Dijo que su planteamiento estriba en revisar el ejercicio de las libertades constitucionales, porque a toda libertad constitucional y garantía individual, hay un derecho y un límite que cumplir. Y pareciera que en el país se olvidó que el ciudadano so pretexto de ejercer una libertad constitucional, olvida la responsabilidad y la obligación que tiene de respetar el derecho de terceros.

¡Recórcholis, recórcholis y más recórcholis! Que manera de perder la brújula, ¿qué tiene que ver la gimnasia con la magnesia?

El “Cero Tolerancia” contra ¿quién o quiénes? La Impunidad de ¿quién o quiénes? El Libertinaje de ¿quién o de quiénes? ¿A qué tipo de ciudadanos se refiere?

¿Esto deberá entenderse como una represión, una intimidación para los dolientes de Creel, por haber acudido para reclamar justicia, molestando a tan insignes personajes que se encontraban en ese hotel?
¿A nadie se le permitirá manifestarse, “expresar” su terror por la elevada inseguridad pública y su dolor porque algún familiar cayó víctima inocente de las balas perdidas que surcan el espacio a diario, y en el lugar y la hora equivocados?
¿Cualquiera que se manifieste, proteste o reclame a las autoridades por su incapacidad y negligencia para garantizarle la seguridad pública a la que tiene derecho y por la que paga, será acusado (a) de “libertinaje social”?

Sin ninguna revisión que les hiciera perder tiempo, El Cero Tolerancia lo deberían imponer todos los chihuahuenses, muy especialmente los juarénses, contra todas las autoridades que no han cumplido con su gran responsabilidad de garantizarles la seguridad personal y en sus bienes, que merecen y deben recibir. Ya que por el no cumplimiento de ella, por su ineficacia e ineficiencia, en gran medida han contribuido a la impunidad con la que el crimen organizado actúa impunemente.

Los chihuahuenses en su conjunto, debieran poner límite a la libertad de expresión de sus gobernantes, por la falta de congruencia entre lo que dicen cuando son candidatos y lo que hacen cuando son gobierno, no obstante que hayan firmado ante notario público cumplir sus promesas.
Eso sin contar que algunos de ellos, de alguna manera se han coludido con la delincuencia organizada, al tolerar la permanencia de jefes policíacos, policías municipales y ministeriales que estuvieron (QEPD) y siguen al servicio de los narcotraficantes.
Ciudad Juárez, Chihuahua. Agosto 26 del 2008. José Luís Elías García.

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