martes, 6 de noviembre de 2007

MENSAJE DE GLENN BECK AL PRESIDENTE FELIPE
CALDERON.

Acabo de ver un video publicado en un portal de Internet con esta dirección. http://www.youtube.com/watch?v-NQBXA2XShQk, en el que aparece un norteamericano de nombre Glenn Beck, que increpa muy duramente al Presidente de La República Felipe Calderón Hinojosa, por la “enérgica protesta” contra Estados Unidos y su gobierno, que hizo durante su mensaje, en el marco de su Primer Informe de Gobierno el 2 de septiembre pasado en Palacio Nacional.

Esa enérgica protesta que le generó bastantes aplausos de los funcionarios de su gobierno y panistas selectos que asistieron, fue en el sentido de reclamar a los americanos “por las medidas unilaterales tomadas por el Congreso y el Gobierno de los Estados Unidos, que exacerban las persecuciones y el trato vejatorio en contra de los trabajadores mexicanos no documentados.

El presidente Calderón además agregó: “México no termina en sus fronteras. Donde haya un mexicano, ahí está México”

Voy a intentar ser lo más imparcial posible.

En primer lugar, Glenn Beck reconoce que Estados Unidos es un país de inmigrantes, pero “Que estamos en el año 2007, no en el año de 1937. Tiempo diferente, mundo diferente”

Se refiere al tiempo cuando era necesaria la inmigración para poblar su país y para conjuntamente defenderse de los indios, a quienes despojaron de su territorio, incluidos los estados de California, Arizona, Nuevo México, y Texas, que eran propiedad de México.

Glenn Beck tiene razón al decir que esas medidas migratorias unilaterales, son tomadas por su gobierno y dentro de su territorio y que para nada necesitan consultar con el gobierno y congreso mexicanos.

Miente cuando dice que ya no necesitan a los inmigrantes, especialmente al grave problema que representa la cortesía del medio millón de mexicanos que año con año cruzan hacia “el otro lado” ilegalmente.

Tampoco reconoce el multimillonario aporte en dólares que estos indocumentados hacen a la economía americana.

Desde que se inició con la política americana de la deportación masiva, muchos agricultores gringos, se han quejado de la pérdida de sus cosechas por la falta de mano de obra barata e indocumentada para levantarlas.

Le reclama al Presidente Calderón su dicho: “Donde esté un mexicano, está México”, que honestamente me pareció una baladronada de su parte. (Algo así como el chiste del presidente municipal electo de Parral, Chihuahua, que aún sin haber tomado posesión, ya le estaba declarando la guerra a Estados Unidos por que golpearon a un inmigrante mexicano indocumentado),

Ya que México y su presidente no tienen la capacidad bélica ni los billones de dólares, para realmente defender a un mexicano en cualquier parte del mundo donde se encuentre.

Pero Glenn Beck parece ignorar ú olvidar, que sus gobiernos americanos lo han hecho repetidamente. Que con el pretexto de defender los intereses de sus paisanos, han intervenido un sin número de países para apoderarse de su petróleo, sus metales e imponer gobiernos peleles.

Tiene razón cuando dice que si los inmigrantes de cualquier país y en este caso los de México, quieren vivir y trabajar en los Estados Unidos, que sigan los pasos legales para ello.

De igual manera acierta al decir que los veinte mil millones de dólares que los mexicanos indocumentados o no, envían a nuestro país, es una muy buena razón para alentar esa inmigración ilegal.

Recordemos que Vicente Fox Quesada, durante su campaña presidencial, propuso enviar al otro lado como braceros a jardineros, carniceros, conserjes, etc., para que realizaran el trabajo que “los negros no hacen en ese país”

En cuanto a la enérgica protesta del Presidente Felipe Calderón, parece ignorar o también olvidar, el trato similar o peor que autoridades de todos los niveles o integrantes de la versión mexicana “Minute man” dan a los inmigrantes centro y sud americanos y de otros países que ingresan por nuestra frontera sur, intentando llegar a los Estados Unidos.

Es elemental y exigible el buen trato que no solo nuestros paisanos, sino todos los seres humanos debemos recibir, de ahí uno de los Principios Universales: El respeto a la dignidad de la persona humana.

Pero debemos ser estrictamente congruentes. Cuando incurrimos en los mismos hechos, perdemos toda la autoridad moral para señalar a otros que incurren en ellos.

C. Presidente de La República Felipe Calderón Hinojosa, con el debido respeto que su investidura merece le pregunto:

¿Acaso su anterior residencia no contaba con protecciones para impedir que extraños penetraran en ella?

¿Por qué no abrir nuestras fronteras para que entren libremente por ellas quienes quieran hacerlo? ¿Acaso corremos el riesgo de que los extranjeros que entren por ellas, van a realizar y quitarles el trabajo de negros que los mexicanos no tienen en nuestro país y por eso emigran a los Estados Unidos?

C. Presidente, es de urgente necesidad el que compruebe lo que usted dijo ser en su campaña política. Un buen negociador. No un tranzador.

Que propicie la integridad socio política, alejada de politiquerías e intereses personales o partidistas.

Que realmente convenza a los dueños del gran poder económico, para que inviertan en fuentes rentables en la industria petrolera y otras, en el comercio, el turismo, en el campo, pero sobre todo en la educación, que generen ingresos aceptables y satisfactorios para evitar que esos seis millones de mexicanos sigan exponiendo su vida para alcanzar el “sueño americano”

O en el peor de los casos, que los obligue a pagar los impuestos que deben pagar, acordes a sus ingresos reales, sin prebendas hacendarias, como el eximirlos de los pagos de traslados de dominio cuando realizan compras como la de Banamex y otros bancos o empresas.

De igual manera, obligar a los informales a que hagan lo mismo. Cuando menos con esos impuestos, se mejoraría un poco la situación económica en México.

Solo así señor presidente su gestión trascenderá y su nombre quedará inscrito en la historia como el mejor presidente que hayamos tenido.

De otra forma, será igual o peor de vilipendiado como sus antecesores.

Ciudad Juárez, Chihuahua. Noviembre 6 del 2007.


José Luís Elías García
El Hombre de La Mancha.

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