HASTA EN ESO ESTA FALLANDO.

HASTA EN ESO ESTA FALLANDO.

Para frustraciones, decepciones, corajes y vergüenza ajena no ganan los mexicanos, con las autoridades que tienen, empezando por el Presidente de la República, quien como no pudo rendir su informe en San Lázaro, ni en Palacio Nacional (como lo hizo el año pasado, porque se “cayó” de su bicicleta), ha estado mandando a sus “secretarios” a las diferentes capitales de los estados para que entreguen una copia y hagan comentarios al respecto.
Además de enviar correos electrónicos a los ciudadanos que cuentan con Internet. Lo que es peor y que pone en evidencia la ineficiencia de sus colaboradores y a Felipe en un completo ridículo. Están enviando cartas relativas al segundo informe, a personas del Estado de Guanajuato, pero llegan a domicilios en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Si en esas minucias fallan, ¿qué se puede esperar de los asuntos “torales”, como elegantemente llaman a los asuntos importantes?

Aparte de comprobar por segunda ocasión el engaño de que fueron objeto durante la campaña de Felipe Calderón, que sus falsas promesas los llevaron a votar por él en el 2006 para que llegara a Los Pinos. ¿Qué pueden esperar los mexicanos de este Segundo Informe de Gobierno?

Únicamente la certeza de que “tan malo es el pinto como el colorado”

Demostrando claramente, que ni Vicente Fox Quesada ni Felipe Calderón, con sus slogans: los gobiernos del cambio, de las manos limpias, el presidente del empleo, etc., para llegar al poder, no tuvieron como objetivos reivindicar los derechos de los más jodidos, cerrar la brecha social entre pobres y ricos, mucho menos darle una orientación distinta al ejercicio del poder. Es más, ni siquiera respetar uno de los postulados de su adorado ¿héroe? Francisco I. Madero. “El Sufragio Efectivo”

Lo único importante para ellos fue el llegar a la mesa donde está el pastel y darle la mordida más grande, no importándoles que les quede la cara “bien chorreada”

No deja de decepcionar, de sentir un gran coraje y una vergüenza ajena, que los actuales integrantes del partido que por cincuenta y tres años, hasta 1992, presumieron de ser una alternativa viable para llegar a una auténtica democracia en México, de que serían honestos para gobernar una vez llegados a presidir el país, son tan ineficientes, tan deshonestos, tan corruptos como los priístas que tanto criticaban. Que incluso hoy se alían en complicidad, en connivencia con ellos para repartirse el gran pastel, mientras sus ingenuos seguidores, muchos de ellos fanáticos, sin capacidad de raciocinio político, mucho menos con los pantalones suficientes para reclamarles su falsedad y engaños; siguen padeciendo la ruina que sus antepasados vivieron antes y después de la revolución y ahora con el segundo gobierno presidencial, en manos de quien se pensó, que por ser panista de abolengo haría mejor las cosas.

Seguramente sus fundadores estarán retorciéndose de rabia en sus sepulcros.

Dentro de seis días el gobierno de las manos limpias, hipócritamente celebrará en el balcón presidencial de Palacio Nacional el Día de la Independencia, gritando a todo pulmón “Viva México”, en memoria del Grito de Dolores en 1910, solo que los asistentes muy posiblemente griten de dolor, por la gran pena que les ha representado ser víctimas de los secuestros y perdida de sus familiares en manos de la delincuencia organizada, que los gobiernos han ayudado a entronizar, Además, de ser víctimas pasivos del aumento en los precios de la canasta básica (a pesar de que había declarado la congelación de los precios de la misma), y de los energéticos (los combustibles han sufrido siete aumentos en los últimos treinta y ocho días), que Felipe Calderón prometiٕó reducir.

Independientemente de que contrario a su oferta política, se han perdido un buen número de empleos, persiste y ha aumentado la deficiente cobertura en los servicios de salud. En Ciudad Juárez, desde el periodo de Ernesto Zedillo Ponce de León, se inició la construcción de un hospital de tercer nivel del Instituto Mexicano del Seguro Social, que supuestamente iba a evitar que los pacientes que requirieran de atención especial, tuvieran que trasladarse a otros estados para recibirla. Ya pasó el sexenio de Vicente Fox y nada.

Acaba de estar el Director Nacional del IMSS, y a pregunta expresa, sobre cuando estaría funcionando tal y como se prometió, respondió que todavía no era posible. ¿Cuántos sexenios más tendrán que esperar los beneficiarios de ese elefante blanco, para recibir la atención que ya pagaron por adelantado?
¿Habrá algo que celebrar el 15 de septiembre, o el ya próximo también 20 de noviembre, fecha de inicio de La Revolución Mexicana?

Eso sin contar, que por imposición internacional, los paniaguados legisladores decretaron que ese mismo día se celebre el Día de la Democracia. ¡Puaf!
Sería muy conveniente y muy patriótico, que si algunos mexicanos, a pesar de todo se sintieran con ánimo para asistir a ese circo, tuvieran el valor de darle la espalda a Felipe Calderón, en el momento de su diatriba o arenga independentista, para después, de frente, a gritos le reclamaran sus falsedades, su hipocresía y le exigieran que cumpla con su ineludible responsabilidad o en su caso renuncie con toda la caterva de inútiles que nombró como funcionarios.

Ciudad Juárez, Chihuahua. Septiembre 9 del 2008. José Luís Elías García.