sábado, 6 de diciembre de 2008

¿COMO EXPLICAR O ACEPTAR LO QUE SUCEDE EN TODO MEXICO?

¿COMO EXPLICAR O ACEPTAR LO QUE SUCEDE EN TODO MEXICO?

Cotidianamente vemos, escuchamos y leemos en los diferentes medios de comunicación, televisivos, electrónicos, radiofónicos y escritos, a los gobernantes y autoridades policíacas de los tres niveles de gobierno (con un elevado costo para los contribuyentes, tratando de explicar y justificar su ineficiencia), emitir interminables declaraciones acerca de su lucha en contra de la incontrolable delincuencia organizada, quienes con la implementación de los operativos conjuntos (el primero de ellos, “muy simbólicamente” en el estado de Michoacán), ampulosamente aseguraron que se iba a generar “el efecto cucaracha”, mediante el cual, los sicarios y delincuentes iban a abandonar los espacios públicos y estos serían rescatados para la ciudadanía.

Solo que estos ineficientes operativos conjuntos, como los insecticidas chafas, en lugar de eliminar a esas cucarachas las robustecieron, y en los últimos catorce meses han ocasionado más daños que antes, representados en más de seis mil asesinatos y secuestros. Eso sin contar con que los delitos del fuero común en todas sus modalidades, se han incrementado exponencialmente.

Con esa complacencia, con esa ineficiencia rayana en la corrupción, que “es no tener madre”, cuando muy alterado por su comprensible desesperación, lo señalara hace unos días el señor Nelson Vargas, en relación al secuestro y aunque no lo deseo, ya posible asesinato de su hija Silvia.

Con esa evidente complicidad entre los altos niveles policíacos y los cárteles del narcotráfico, cuya pestilente cloaca se ha venido destapando en las últimas semanas. Con ese decidido apoyo de Felipe Calderón, para seguir sosteniendo a los titulares de las diferentes dependencias policíacas federales, aún con su demostrada incapacidad e ineficiencia y muy posible contubernio y complicidad con el crimen organizado.

De igual manera con el incomprensible apoyo y sostenimiento de algunos gobernadores para con sus procuradores de justicia, aún con las fuertes denuncias en su contra, como es el caso del de Jalisco, quien ha sido señalado como presunto pederasta, y el de Tamaulipas, quien estuvo preso en el penal de Topochico, Nuevo León, por daño en propiedad ajena y que falsificó sus documentos personales.

Es también el caso de los presidentes municipales para con sus “jefes” policíacos, como es el de José Reyes Ferríz en Ciudad Juárez, quien ha sostenido a capa y espada al inútil secretario de seguridad pública Roberto Orduña Cruz, quien tomó posesión en mayo pasado y desde entonces, salvo breves apariciones, se encuentra encuevado en el bunker de la estación de policía Babícora, con vehículo blindado, eso si cobrando muy buenos billetes por hacer nada. Con sus antecedentes de militar de ¿carrera? Y con su actual actuación, Roberto Orduña Cruz, deja muy mal paradas a las fuerzas armadas en cuanto a su valor e inteligencia.

Con todo lo relacionado anteriormente, ¿cómo aceptar que estas autoridades están cumpliendo con la ineludible responsabilidad que tienen para con la ciudadanía: El garantizar la seguridad, tanto en sus personas como en sus bienes legalmente tutelados?

Ya se cambió el nombre de los operativos conjuntos, ya se cumplieron los fatídicos cien días, después de la Reunión Cumbre de Seguridad Pública Federal, que fue propiciada y presionada por Alejandro Martí padre del menor Fernando Martí (quien fuera secuestrado y posteriormente asesinado por elementos de la PF, en complicidad con la banda de La Flor), de la que surgieron 74 o 75 compromisos (para el caso es lo mismo), que ellos mismos se fijaron y con los que presuntamente se iban a dar los resultados de seguridad que los mexicanos requieren y pagan, y aparte de “el accidente” en el que perdieran la vida el secretario de gobernación Juan Camilo Mouriño, el ex titular de la SIEDO, José Luís Santiago Vasconcelos y cerca de una docena de personas más, el único resultado de esa reunión, ha sido el despiadado y cruel aumento de la sanguinaria violencia.

Se cumplieron los cien días y no han renunciado, mucho menos han mejorado su eficiencia. Siguen nadando de muertito.

Es tanta la falta de capacidad, de congruencia con su oficio, de todas las autoridades, que como palo de ciego, algunas ya se sacaron de la manga el As de la pena de muerte y el implementar el Cero Tolerancia. Es decir, han venido actuando a base de ocurrencias, sin ninguna estrategia, carentes por completo de la inteligencia que tanto presumen.

Independientemente de la falta de confianza en las procuradurías en todo el país, de los jueces, de los ministerios públicos, ¿A quiénes le van a aplicar esa pena de muerte si no detienen a nadie, excepto a los “chivos expiatorios”?, que por fortuna algunos han salido libres, sin siquiera un usted disculpe, como tampoco se les ha indemnizado por los daños físicos y morales que les han ocasionado a ellos y sus familias.

En cuanto al “Cero Tolerancia”. Ese se les debería aplicar a los gobernantes y a las autoridades. Pero por desgracia y a eso le apuestan, una gran mayoría de los mexicanos está conformada por puros agachones, que aceptan sin discusión los que a estos inútiles se les ocurra. Es más, sumisamente se dejan acarrear para aplaudirles a rabiar, cambio de una Pepsicola con pan.

El despresidente de Ciudad Juárez José Reyes Ferríz ya consiguió los recursos para la construcción en Ciudad Juárez del “Cereso Productivo”, que según él tendrá capacidad para albergar a 1,200 reclusos y que pronto estará en funcionamiento.

Vuelvo a preguntar: ¿A quiénes van a recluir, a los borrachitos que los poli municipales atracan al salir de los bares y cantinas?

En cuanto a lo de productivo: ¿Este nuevo CERESO será igual o más que el actual, que está considerado el más grande picadero de Ciudad Juárez?

Ciudad Juárez, Chihuahua. Diciembre 6 del 2008. José Luís Elías García.

No hay comentarios: